martes, 4 de marzo de 2014

Crema de Auyama

Con esta vaina me llevé una sorpresa chimbísima: ¿sabían que la crema de auyama estándar se hace con caldo de carne o pollo? Yo no sabía. La vida siempre anda metiéndole animales por ahí a uno cuando uno quiere evitarlos. Nojoda. Maldito engaño.

En fin, aquí les va. 

Esta receta la pueden sacar también de los recetarios de Scannone. De ahí la saqué yo. La cantidad que les doy aquí da como para dos platos (no tenía más auyama).

Paso 1:


Váyanse por lo clásico. Ábranse una cervesita porque, mierda, consiguieron Polarsita y en Caracas últimamente conseguir alguna cerveza mínimamente decente es un real reto (casi tanto como un líder político decente. BOOM chiste político).

Paso 2:


Los ingredientes:

  • 1/2 kg. de auyama
  • 4 tazas de agua
  • 2 1/2 cucharaditas de sal
  • 1 1/2 cucharadas de mantequilla
  • 1/2 taza de cebolla picadita
  • 1/4 taza la parte blanca del ajoporro picadito
  • 2 tazas de caldo de pollo/carne
  • 1/4 cucharadita pimienta blanca, recién molida
  • 1/3 taza crema de leche (pueden un pelo más o menos, dependiendo de que tan fuerte quieran el sabor. Mientras más crema de lecha, más suave el sabor)
  • cubitos de pansito tostado con mantequilla
  • cubitos de queso blanco (aquí lo ideal es tipo paisa o guayanés, como allá no tienen, les recomiendo feta o mozzarella)
Paso 3:



Pelen la auyama. Esto es una pesadilla. Tienen que luchar contra esa maldita concha que no se quiere salir. Esos dos cuchillos Y el pelador fueron los implementos que yo tuve que usar para pelar bien la auyama. No fue fácil. Odien a la auyama.


Piquen a la auyama en cubitos. Disfruten que la muy maldita se lo merece.

Paso 4:

    
   

Echen la auyama en una olla, pónganle 2 cucharaditas de sal y llenen la olla con las 4 tazas de agua (puede ser un pelo más, la idea es que cubra la auyama). Dejen hervir por más o menos 25 minutos, o hasta que la auyama esté bien bien suave.

Paso 5:


Mientras el agua hierve, piquen la cebolla y el ajoporro.


Pongan la mantequilla en una olla (esta vez sí que tiene que ser una olla).


Echen la cebolla y el ajoporro en la olla. Dejen sofreír un ratito a fuego lento (nunca voy a dejar de repetir la importancia del fuego lento cuando uno sofríe. Da una ladilla horrible esperar; pero mejor esperar que que se te queme tu mierda).

Paso 6:

Si son como yo y, como no tenían caldo, usaron consommé de carne en lata, abran la lata con mucho cuidado, recordando como se cortaron con la lata de la mantequilla cuando hacían el gazpacho y, en el último momento, cáguenla de la peor manera y córtense aún más intensamente que con la mantequilla.


Sigan impresionándose con la cantidad de sangre que su mano produce (no saben, tuve que intentar esta foto como 5 veces porque se me llenaba la mano de sangre antes de que lo lograra).



Corran arriba y revisen los baños ajenos buscando curitas desesperadamente. Consigan una que está tan vieja que la pega se le secó. Impresiónense con el hecho de que están sangrando tanto que la sangre atraviesa la curita.


Pierdan la curita en menos de un minuto por la cantidad increíble de sangre. Ríndanse con la curita. Busquen por la cocina otra solución mientras se paran la sangre con papel absorbente.


Disfruten como si tuviesen 10 años con lo asqueroso del hueco que se les abrió en la mano. Mándenle una foto a Wladimir para incomodarlo.


Dense cuenta de que el papel absorbente en verdad funciona súper bien para controlar la sangre. Cojan una especie de tirro de tela que tienen a la mano por una serie de fotos anteriores que hicieron en la cocina también y péguense ese papel absorbente a la mano de una manera medio animal. Siéntanse cool porque esa cosa en la mano les hace sentir como en fight club.

Paso 6 (parte II):


Echar el caldo/consommé en la olla con el ajoporro y cebolla (si usan consommé de carne, les recomiendo aguarlo previamente, usando sólo 1/2 taza de consommé y 1 1/2 de agua).


Dejen que el caldo hierva y luego déjenlo cocinando a fuego bien lento por unos 2 ó 3 minutos.


Miren que lento ese fuego.

Paso 7:


Tuesten el pan con un poco de mantequilla. Corten el pan y el queso en cubitos.

Paso 8:



Cuando ya la auyama esté suave (después de tanto peo ya seguro que lo está). Colen esa auyama para que no le quede agua.

Paso 9:


Metan todo en la licuadora, pónganle la media cucharadita de sal que les quedaba y la pimienta. Licuar todo (o, ya saben, a falta de licuadora, palito msshhññ, mejor conocido como batidora de mano).

Paso 10:


Pasen todo lo licuado a la olla otra vez. Déjenlo hervir y cocinen luego por unos 2 ó 3 minutos. En las palabras de Scannone "se corrige la sazón", apagan el fuego y le echan la crema de leche. Yo recomiendo que prueben ahí otra vez porque coño puede que quede muy suave o muy fuerte el sabor. Ahí ven si quieren ponerle más crema de leche, sal, o lo que sea.

Paso 11:


Sirvan su vaina maricamente y disfruten.

Salú y buen provechó.


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