Tengo dos recetas de galletas que son mis favoritas: unas de nueces de macadamia y chispas de chocolate (que son brutales para hacer en versión "mágica") y estas. Como aquí no se consiguen nueces de macadamia desde hace como 3 años, esa receta no la puedo compartir (hasta que alguien me traiga macadamia =D). Como la vida no es tan mala, sí que puedo compartir esta receta. Estas galletas tienen varias cosas buenas:
- son buenísimas
- son nutritivas
- son súper fáciles de hacer
En verdad no se me ocurren más cosas, creo que sólo me distraigo porque son muy buenas. El día que Wladimir llegó a visitar de Canadá llevé un pote grandote de estas galletas a su casa.... al día siguiente ya se habían acabado. Just sayin'...
Así que ya saben, si quieren hacer unas galletas buenísimas, fáciles de hacer y que les van a hacer quedar extra bien con la gente que las pruebe, esta es tremenda opción.
Paso 1:
Tal vez ustedes viven en lugares donde pueden ir a comprarse un Chai por ahí donde quieran (como en el Caj Chai en Barrio Gótico que es súper agradable y lleno de cosas ricas); pero yo no tengo esa suerte; así que por antojada aprendí a hacerme un Chai casero. La receta es súper fácil. Lo único que les digo es que, si lo van a intentar, compren todo ya molido. No cometan el mismo error que yo, que terminé pasando como 3 horas moliendo cosas.
Los ingredientes:
- 1/4 taza pimienta negra molida
- 2 cucharadas más 1 cucharaditas de gengibre molido
- 2 cucharadas de canela molida
- 2 cucharadas de cardamomo molido
- 1 1/2 cucharadita de clavos molidos
- 1 1/2 cucharadita de nuez moscada molida
Siéntanse libres de perderse un rato tomando fotos de algunas de las especies porque es divertido.
Todo esto lo mezclan junto y guardan en algún frasquito o bolsita hermética. Esta mezcla de especias se llama Chai Masala. Cuando quieran tomarse un chai sólo tienen que mezclar
- 1 cucharadita de chai masala
- 1 taza de agua
- 1 taza de la leche que prefieran (a mí me gusta muchísimo con leche de almendras e internet me dice que con leche de coco es brutal)
- 4 cucharaditas de té negro (yo uso uno que conseguí que viene con vainilla francesa; pero cualquier té negro funciona)
- el edulcorante que prefieran
Todo eso lo mezclan junto, lo ponen a hervir, después de que hierva lo tapan y dejan por unos 5 minutos. Después de esos 5 minutos, lo sirven pasándolo por un coladorsito con huecos bien chiquitos. Pueden agregar más leche o azúcar (o el edulcorante questén usando, pues) si quieren.
Paso 2:
Volviendo a lo que vinimos. Las galletas.
Los ingredientes:
- 1 3/4 tazas de harina de trigo
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 taza (dos barras) de mantequilla o margarina derretidas
- 1 1/4 tazas de de azúcar morena
- 1/2 taza de azúcar
- 2 huevos grandes
- 2-6 cucharaditas de leche de almendras
- 3 cucharaditas de extracto de vainilla
- 1 cucharada de canela
- 2 1/2 tazas de avena
- 2 tazas de chocolate negro de taza, roto en pedacitos chiquitos
Paso 3:
Echen en un bol majomenos chiquito la harina, el polvo de hornear...
... y la sal. Denle vueltitas y mezclen esa vaina.
Paso 4:
Pongan a precalentar el horno a 375ºF.
Echen la margarina o mantequilla derretida en un bol grande. Yo la derrito en microondas; pero la pueden derretir como quieran.
Vayan agregando el azúcar poco a poco y mezclando esa vaina. Yo lo hice con batidora eléctrica porque soy floja y tal; pero no es necesaria en absoluto. De hecho está de más. Cuando sigan viendo las fotos verán que ahí mismo cambié a mezclar todo con una cuchara normal y ya.
Como pueden ver, yo usé solamente azúcar blanco; pero la única razón de esa decisión es que hace años que aquí no se consigue azúcar morena. Les prometo que esto sabe mejor con azúcar morena. De hecho si usan 1 3/4 tazas de azúcar morena en vez de la mezcla de los dos azúcares, seguro que las galletas les quedan increíbles. En fin, que no dejen de usar el azúcar morena porque es mágico (¿a?). <3
Paso 5:
Ahora agregan la leche de almendras (pueden usar leche normal; pero el sabor es mejor con leche de almendras). Si ven en los ingredientes, puse entre 2 y 6 cucharadas de leche. Les explico por qué: la cantidad de leche va a definir la contextura de las galletas. Si le ponen menos leche, las galletas van a tener una contextura más infladita clásica, tipo así. Si le ponen más, tendrá una textura más planita y alargada, tipo galleta de subway. Mientras más leche, más plana.
Como en mi casa prefieren las galletas más bien planitas, yo le eché esta vez 6 cucharadas de leche de almendras; pero cuando hago para otra gente le pongo 3. Ya verán ustedes como las prefieren.
Echen los huevos...
... la vainilla...
... y la canela. Pueden echarle más canela si quieren, la mezcla queda brutal.
Mezclan todo lo anterior hasta que tengan una mezcla homogénea (con una cuchara normal se mezcla perfecto, no sean idiotas como yo).
Paso 6:
Van agregando la mezcla inicial de harina y eso poco a poco y mezclando hasta que tengan una mezcla homogénea y ya mucho más espesa.
Paso 7:
Agregan la avena...
... y el chocolate roto en pedacitos. Una buena manera de romper el chocolate en pedacitos es caerle a golpes con algo pesado. Yo por ejemplo tengo un martillo de esos de suavizar carne que creo que nunca se ha usado para ese fin en mi casa. Con eso le caigo a golpes por un rato al chocolate. Vale la pena igual revisarlo antes de echarlo y con un cuchillo cortar los pedazos medio grandes que queden.
Mezclen toda esa verga y vean como ya tienen un cookie dough bien que tal (que ya sabe súper rico, por cierto). ¿De dónde habrá salido esa vaina de que comer la harina sin cocinar cae mal? Yo me la paso haciéndolo y mi único problema ha sido el reciente de la alergia; pero aparte de eso nada.
Paso 8:
Con mantequilla aparte de la que usaron para la mezcla, engrasen unas 3 bandejas... o una que usarán 3 veces. Esta receta da para muchísimas galletas. Tipo 48, algo así. No tengan miedo de hacer la receta por la mitad si quieren. Da igual. De todos modos son galletas y duran bastante.
Pongan bolitas de galletas en la bandeja. Yo las aplasto siempre un pelo porque en serio me molesta que se inflen demasiado; pero eso ya depende de cada quien. Si les van a poner las 6 cucharadas de leche, sepárenlas más de lo que ven en esta bandeja, porque si no les va a pasar como a mí que se medio pegan todas entre sí y quedan como hexagonales y no tan bonitas.
Metan esa verga al horno. Si las hacen con 6 cucharadas de leche, déjenlas 10 minutos. Si las hacen con menos leche, cocinen entre 9-10 minutos para galletas chewy y entre 12-13 para galletas duritas (cuando las hago con menos leche me parece que el tiempo ideal es 10-11 minutos).
Saquen la bandeja y déjenla enfriar por unos 10 minutos, o hasta que la puedan tocar sin quemarse. Con una espátula sacan las galletas (¿ven lo que les digo de que quedan como hexagonales?).
Noten como la receta da para muchísimas galletas. Noten lo alta que es esta montaña de galletitas y son de las planas. Es tremenda receta para regalar o tener galletas en casa por algún tiempo y para visitas y tal. También para llevarle a gente para consentirlos o quedar bien.
Los de ustedes que tengan sobrinos o niños con los que interactuar a veces, es una buena galleta para meterle avena y cosas nutritivas a niños y que ni se den cuenta (o, en mi caso, a mi mamá, que últimamente come como un niñito).
Lo único malo de estas galletas es lo rápido que se suelen acabar para la cantidad que son (vuelvo a mencionar el caso de las que llevé a casa de Wladimir que no duraron ni un día jajaja).
Disfruten consintiendo y consintiéndose con estas galletitas.
Salú y buen provechó.
<3